Vino a mostrarme cómo se había arreglado para mí. Con una mirada tímida y una sonrisa a medias lució su vestido floreado. Ante mi halago soltó una pequeña risita. Zapatitos negros dificultaban su caminar. Color rouge en sus labios y una pose sensual para mi agrado. Recogido su cabello hacia atrás, sus piernas al descubierto. Sus videos una y otra vez, imágenes del pasado.
A paso rápido, se alimentó de mis ganas, y desapareció. Quería desaparecer, no volvió.
Cabellos hermosos, ojos bien grandes observandome. Esperando una movida. Ignoró mis palabras y siguió. Una vez más desapareció.
Le rompí el corazón, y no fui capaz de llorar una lágrima por ella.
La última vez que la ví estaba bellísima. Tenía algo en ella que me cautivaba. Me daban ganas de abrazarla, de tocarla. Su pelo, sus ojos, sus labios. Sus ropas, sus peinados, sus gestos. Como es usual, llegué tarde. Pero ésta vez no había un lugar para mí en su entorno. Otro hombre había robado lo que me pertenecía, mi lugar en su corazón. Pobre de él, lo primero que se me cruzó por la cabeza, fue un deseo de asesinarlo. De romper su hermoso rostro y deformarlo. Pero, esclavo de mi cobardía, me alejé y dejé que un tercero tomara en sus manos a mi chica. Aunque a los pocos segundos descubrí que mis prejuicios no eran más que eso, prejuicios. El hombre, al ver mi cara lastimada (Reflejo de mi corazón), se acercó, y me cedió el lugar.
2 comentarios:
Vos me enseñaste todo lo que se, soy lo que soy gracias a vos.
Vos me enseñaste a ver y a disfrutar.
Esta alumna jamás podrá superar a su maestro.
Te Amo.
Eueueueueueu rubio a vos te quiero muchiisisisisimo & de verdad , lo sabés bien . Gracias :)
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