Ésta mañana, me levanté.
Esta mañana me levanté sin saber qué era lo que necesitaba. No sabía si te necesitaba a vos, o un simple abrazo. Si quería un beso, o si quería llorar. Si buscaba amor o reproches. Luego de pensarlo un rato, concluí en que no importaba qué era lo que necesitaba, sino que, lo que necesitaba, era algo (cualquier cosa) que viniera de vos.
Ensueño.
Fue el sueño mas vivido que jamás tuve. Tan cierto, y extraño. Una galería de recuerdos, de sucesos del pasado. Viví en carne propia cada historia nuestra, una vez más. Cada mirada y cada entonación. Juro que sentí tus labios presionar los míos. Y tenías el mismo sabor que años atrás.
Me costó descifrar la forma de tu fina boca por el tiempo transcurrido. Pero al final, pude ser una vez mas, el hombre que tanto te quiso.
¿Qué me está pasando? Te extraño tanto, a vos y tu dulzura. Te estoy queriendo de más. Mas de lo que vos me querés a mí quizás. Tengo miedo. Necesito de tu contención. Ahora.
Sin vos.
¿Por qué cada canción es una melodía triste?¿Cada sábana es fría?¿Cada mañana sin vos es insoportable?
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