Feliz que te hayas ido.

Respirame, cada vez que cierres tus ojos. Probame, cada vez que llores. Mirame, en los ojos de otro chico. Date vuelta, cuando me veas pasar de vez en cuando.
Este recuerdo va a desaparecer y morir. Sólo por hoy, respirame y decí adiós.

¿Cuántas veces? ¿Cuántas veces? Ya no te puedo mirar a los ojos. Y ni siquiera quiero intentarlo, porque cada palabra que viene de vos es una mentira.